sábado, 19 de julio de 2008

POR EL BUEN CAMINO

Caminábamos por un camino largo y fangoso; la noche estaba cerrada.

No había luna ni para mirarte los dedos de las manos.

Ibamos gente de la ciudad; torpe de andar por piedras y fangos.

El vaqueano Juan, un campesino analfabeta de vez en cuando se detenía,se agachaba, auscultaba con sus manos la maleza, la olía e indicaba hacia donde seguir la marcha.

Detrás se oían murmullos de cuestionamiento...

¿Qué va a saber este indio ignorante hacia donde nos lleva?

Yo puedo guiar al grupo para eso ando mapa, brújula y foco.

Algunos en la fila; alentaban el murmullo.

Así; caminamos dos horas o tres.

Al llegar a una encrucijada el vaqueano Juan se detuvo y se quedó unos minutos quieto; observando.

El cuestionamiento subió de tono.

¡Miren! si ya se perdió. No sabe donde nos lleva.

Marlon; Uno de los cuestionadores se adelantó a la fila y dijo en todo enérgico:

¡Oye Juan! ¿Te has perdido?

Juan no le contestó y dijo: vámonos por el camino derecho.

¿Por qué? Protestó Marlon y los otros cuestionadores. Por allí es mas largo el camino a casa.

El vaqueano Juan le respondió: Por allí no se llega hoy a casa.

Marlon le dijo: ¿Es que tienes miedo?

Somos suficiente para enfrentarnos con cualquiera.

En medio de la tensión atiné a decir; háganle caso a Juan el sabe lo que dice.

Marlon ofuscado le dijo a los otros cuestionadores: Los que quieran llegar temprano a casa que me sigan.


Juan se colgó su mochila y enrumbó por el camino derecho reiniciando la marcha.

El grupo se había dividido.

Marlón y los otros cuestionadores jamás llegaron a casa.

El buen líder; traza el camino correcto, aunque sea mas largo y mas tarde la llegada.


Homero.

10 comentarios:

El Zopilote dijo...

Muy cierto tu post, asi es.

saludos Homero!!

Gatadeangora dijo...

Muchas veces no es bueno atajar.
Besos

Anónimo dijo...

Tienes mucha razón. Y todos los días lo vemos una y mil veces, pero en ocasiones no nos damos cuenta hasta que ya es tarde.
(Acepto con mucho gusto y honor tu invitación, amigo Homero, sólo dame un poco de tiempo porque ya sabes que yo soy lento y pesado, pero seguro).
Un fuerte abrazo.

Doncel dijo...

Homero;
Antes que nada darte las gracias por alzar tu voz en mi colina.
Y como no,agradecerte también tu invitación al blog, comuniquemonos. En un pricipio, estoy muy ocupado y no tengo mucho tiempo para el ordenador,espero no te moleste, si no acepto tu invitación, no descarto, más adelante aceptarla.
Muchas gracias y un abrazo desde Barcelona.
Antonio

Sandra Figueroa dijo...

Vale mas llegar tarde a casa, que muy pronto al panteon. Vine a dejar saludos y besos hasta tu ventana, cuidate.

Lara dijo...

No importa llegar tarde, lo que importa es llegar ;)
Muuuuuacks!

Anónimo dijo...

A veces el camino más largo es el más corto.

Saludos.

Menina do Rio dijo...

Homero, agradeço o convite. Vou dar uma passada lá pra ver. No mais desejo que tudo esteja bem contigo e com todos de Nicarágua.

Um beijo

Runas dijo...

Gracias por tu invitacion, no se si podré hacerlo por ahora, ando un poco mal de la mano y me cuesta escribir. Me ha gustado tu post. Un beso

Maya dijo...

En total conformidad. Mi abuela siempre me decía Homero, que los hombres del campo, los más viejos, los callados y los que conocen sus territorios porque han logrado comunicarse con la naturaleza son los que deben liderar al grupo cuando la noche se hace oscura. A ellos hay que seguirlos y respetar sus tiempos y sus códigos ancestrales. Muchas veces ignoramos ésto y creemos que la tecnología es el remedio o la mejor solución para una decisión. Falso. Juan sabía porque debía ir por ese camino. Y como sabio que es, no discutió el libre albedrío de una parte del grupo. Una pena por los que no llegaron a casa. Una lección de vida, para los que si llegaron y pudieron compartir la mesa con su familia.

Un abrazo.

Maya