jueves, 12 de marzo de 2009

ME ALISTO TODAS LAS MAÑANAS

Me alisto todas las mañanas sin verme en el espejo
para no sentir lástima de mi apariencia vacía y taciturna.

Salir con la sonrisa forzada
tanta veces ensayada por las calles.

Y recorrer una y otra vez
esos recodos del tiempo
glaciados en imágenes escarlatas y frías.

Metálicas.

La gente se queja de todo,
de lo que tiene y de lo que no tiene;
bajo la mirada expectante de los indigentes
que deambulan con el hambre y la miseria a cuestas.

¿Que valor podría tener frente a eso mi tristeza?


Se que te arrecuestas en otros hombros
envuelves tu cuerpo con otras sábanas
llenas de evidencias.

Y solo; terriblemente solo
esperando tu regreso.


El sabor de la vida sabe a pájaros muertos
en las azoteas,
grises;
espantados los colores
imperan las sombras.


Homero.
Mi Cuarto.
Marzo 12, 2009.
Hora: 8:21 p.m.

4 comentarios:

almena dijo...

El sabor agridulce de la soledad que espera...

Darilea dijo...

Que triste saben tus letras.
Besitos y que pronto llegue el sol a tu ventana.

HOMERO dijo...

Así es almena. Gracias por pasar. Saludos. H.

HOMERO dijo...

Darilea: Si son tristes mis palabras pero hasta el momento he sobrevivido a ellas. Gracias por pasar amiga. Un beso. H.